jueves, 23 de noviembre de 2017

Para Tí, Zorba el Griego - Guitarra José Feliciano



FE DE ERRATA: EN LA TRADUCCIÓN ESCRITA!!!
Donde dice averles, debe decir haberles.
Donde dice eligue, debe decir eliges.
Donde dice paciensia debe decir paciencia.

COMO VIVIR LA VIDA- "TU NO ERES TU DOLOR"

“Vale la pena vivir la vida como si fuésemos a morir mañana … ¿o más bien vale vivirla como si nunca fuésemos a morir?” ( Zorba el griego)

Tu no eres tu dolor:-El gran experto en mindfulness Jon Kabat-Zinn pone siempre de ejemplo a Zorba el griego y su extraordinaria capacidad de aceptar la “catástrofe total” de la vida, así que no se puede pedir más de un personaje mítico del que podemos aprender tanto.

Y, una melodía que asociamos a la película "Zorba el Griego" y a Anthony Quinn bailando hasta la extenuación en una de tantas playas cretenses.. Una escena que ya se ha convertido en un icono en la historia del cine y que llegamos a asociar con el estilo de vida griego.
Pero “Zorba El Griego” es mucho mas, nominada a 7 Oscars en 1964, es, sin duda, un auténtico canto a la vida, a la amistad y a como afrontar nuestras circunstancias con buen humor, con alegría y con aceptación.
Años 30.En el puerto del Pireo(Atenas), Basil (Alan Bates) un escritor ingles introvertido, entabla amistad con un alegre trotamundos llamado Zorba (Anthony Quinn). En pocas horas Basil queda prendado de la vitalidad de Zorba y le contrata para que le ayude a levantar de nuevo la vieja mina de su padre en Creta. Con esta decisión, Basil iniciará un viaje hacia el descubrimiento del verdadero significado de la vida y de la amistad bajo la tutela de Zorba.
Basil es demasiado cerebral, vive una existencia aburrida y desnortada y rara vez disfruta de la vida. Por otro lado Alexis Zorba en muchos aspectos todo lo contrario. Es extrovertido, agradable, está lleno de energía y con mucho sentido del humor que le lleva en muchas ocasiones a meterse con Basil.
Zorba: ¡Caramba jefe!, lo aprecio demasiado para no decirlo ¡Usted lo tiene todo!! Menos una cosa,”Locura” y un hombre tiene que estar un poco loco, si no…
Basil:..Si no…
Zorba: Nunca se atreve a cortar la cuerda y ser libre ¿Esta enojado conmigo?
Zorba vive con intensidad la vida, intensidad por conocer, por disfrutar y por aprender. Se queda boquiabierto al mirar el mar, como si fuera la primera vez que lo viera.  Se embelesa al escuchar un ruiseñor. A medida que Basil le va conociendo, se da cuenta de la vida tan insulsa que ha estado llevando, y aprende de Zorba a disfrutar de su existencia.
“Mirábalo a Zorba al fulgor de la luna y me maravillaba la fe en sí mismo, la sencillez con que se acomodaba al mundo viviente; cómo su alma y su cuerpo formaban un todo armonioso; y como toda cosa, mujeres, pan, agua, carne, sueño, se confundían alegremente con su carne y se convertían en Zorba. Nunca jamás había presenciado tan amistoso entendimiento entre un hombre y el universo”(extracto del libro Alexis Zorba de Nikos Kazantzakisen donde esta basada la película)

Zorba también expresa su alegría y libertad a través del baile, utilizándolo como una forma de expresión de sus emociones, positivas y negativas. En un momento de la película Zorba recuerda como el baile le ayudó años atrás a enfrentarse con el tremendo dolor de la muerte de su primer hijo. Baila libremente, intensamente, sin ningún tipo de inhibición, baila hasta la extenuación. Incluso Basil, en un acto que simboliza su cambio, le pide que le enseñe a bailar, quiere aprender a dejarse ir en la vida, a vivir con intensidad, a disfrutar por encima de todo su existencia.










lunes, 13 de noviembre de 2017

Expedición a La Cueva de Los Tayos

El PASAJE OCULTO DE LOS TAYOS - RAÚL CABRERA EXPLORÓ LOS MISTERIOS y los muestra en un corto. 

Según su relato, para alcanzar La Cueva...expone su vida al límite cuando atraviesa estrechos túneles subterráneos, algunos llenos de agua que supera con peligroso riesgo, en total oscuridad.
Y, explicó ante la curiosidad del público que no habría alcanzado su aventura, sin la preparación física que posee...entre ello, la práctica de apnea o buceo libre (freediving)-deporte extremo, el cual tiene como base la suspensión voluntaria de la respiración dentro del agua mientras se recorren largas distancias o se desciende hasta grandes profundidades.  





Fue en 1969 cuando Juan Moricz, un flemático húngaro nacionalizado argentino, espeleólogo aficionado y experto en leyendas ancestrales, encaró este apasionante misterio del oriente selvático del Ecuador.

Aunque Moricz no era el primero en tropezarse con el intrincado de túneles y galerías subterráneas que dan cobijo a los Tayos (aves nocturnas - imagen inferior - cuyos polluelos son muy codiciados por los indiosshuaras), es innegable su valentía y arrojo al haber sido, sin duda, el primero en dar a conocer a nivel mundial la existencia de este sistema intraterrestre.


Cueva de los Tayos

Leyendo tan sólo la acta notarial de su hallazgo, con fecha 21 de julio de 1969, en la ciudad costeña de Guayaquil, a cualquiera se le encrespan los cabellos frente a estas detonantes afirmaciones:
"...he descubierto valiosos objetos de gran valor cultural e histórico para la humanidad. Los objetos consisten especialmente en láminas metálicas que contienen probablemente el resumen de la historia de una civilización extinguida, de la cual no tenemos hasta la fecha el menor indicio..."
Frente a esto, es inevitable pensar en la posible relación entre las planchas que menciona Moricz - halladas en una cámara secreta de la Cueva de los Tayos - con las planchas metálicas de complejos ideogramas que han sido visualizadas en nuestra experiencia de contacto, aquella biblioteca cósmica que los Guías extraterrestres denominaron "El Libro de los de las Vestiduras Blancas".

Veamos a continuación los intrincados de este misterio - que palpita aun en la selva ecuatoriana - y cómo llegó Moricz a descubrir los túneles de esa esquiva humanidad subterránea.
UBICACIÓN Y DESCRIPCIÓN DE LA CUEVA DE LOS TAYOS

A una altitud aproximada de 800 metros, en una zona montañosa irregular, en las faldas septentrionales de la Cordillera del Cóndor, se sitúa la entrada "principal", o más bien, la entrada "conocida" al mundo subterráneo de la Cueva de los Tayos. El acceso consiste en un túnel vertical, una suerte de chimenea con unos 2 metros de diámetro de boca y 63 de profundidad.

El descenso - no apto para cardíacos - se realiza con un cabo y polea. De allí, un verdadero laberinto se abre al explorador por kilómetros de misterio, que deben ser recorridos en la más absoluta oscuridad. Las linternas más potentes son nada ante semejantes galerías donde una catedral entera podría caber.

La Cueva es denominada habitualmente "de los Tayos" debido a que su sistema de cavernas es el hábitat de unas aves nocturnas llamadas Tayos (Steatornis Caripensis), que constituyen la misma especie que se ha hallado en otras cavernas de Sudamérica, como por ejemplo, los "guacharos" en Caripe, Venezuela. El estudio inicial de esta conexión intraterrestre entre especies de aves nocturnas lo abordó detalladamente el sabio alemán Alejandro de Humboldt, en su obra: "Viaje a las Regiones Equinocciales del Nuevo Continente" (1800).

Es sumamente sospechoso que una misma especie de aves ciegas esté diseminada en diversas cavernas de Sudamérica. ¿Será que todos aquellos laberintos intraterrestres no son cavernas aisladas y guardan una conexión?

En las inmediaciones de la Cueva de los Tayos del Ecuador viven los Shuaras, quienes en el pasado fueron conocidos con el nombre "Jíbaro" - denominación despectiva para ellos -, famosos - también en el pasado - por su bravura y el arte de reducir cabezas. Ellos son los primeros exploradores del sistema subterráneo, ya que cada mes de abril bajaban a la cueva para hurtar los polluelos de los Tayos - que son más grandes que una paloma.

Y en medio de esta faena se toparon con una serie de sorpresas. La más resaltante, fue sin duda, el hallazgo de gigantescas huellas sobre bloques de piedra que, por sus ángulos rectos y simetría, sugieren un origen artificial. Moricz recogió estos relatos en su visita al oriente Ecuatoriano, pudiendo comunicarse sin mayor dificultad con los nativos gracias a su dominio del Magiar, un antiquísimo lenguaje húngaro similar al dialecto Shuar. Obviamente, Moricz sabía muy bien a qué blanco apuntar.

Desde 1950 seguía pacientemente la "pista" que lo podría llevar al reino subterráneo. Algunas fuentes, incluso, lo vinculan con una extraña orden esotérica húngaro-germana, hecho que podría explicar el profundo conocimiento esotérico que esgrimía en sus controvertidas entrevistas a los medios de prensa. Sea como fuere, Moricz estuvo en Perú, Bolivia y Argentina buscando estas entradas antes de llegar al Ecuador. En más de una entrevista subrayó lugares como Cusco, el Lago Titicaca y Tierra del Fuego, como los posibles lugares desde donde "se puede descender al reino subterráneo"