Por aquéllos días, lejos estábamos de reconocer, que las “estructuras” del sistema dentro del cual el hombre se realiza, son tan sutiles como la vida misma.
Quién era ese hombre, detrás de impecable imagen, tan plantado en su “cargo” al que se refería con cierta ironía, y muy disgustado ante la situación de la empresa estatal en manos de gobiernos militares (me habló de ascensos postergados y nominaciones a funcionarios del mismo rango)
Por otra parte, algo místico en su gesto, hacía creíble el diálogo..
Llegué a mi departamento con mil preguntas sin respuestas...por supuesto, la inquietud llevaría a indagar -a qué apuntaba esa estúpida charla-
En la primera ocasión, interpelé:-dime Santos, qué hay de tus sueños?
-proyectados en la familia, el trabajo y la política gremialista, logré una sólida “estructura” y la satisfacción de obrar a favor de otros…
-no entiendo –interrumpí-
(un individuo exento de egoísmo - virtud poco común- pensé)
De un trago bebió el café y continuó: -a pesar de la edad, o mejor dicho de las experiencias que traen los años, existe un “sueño” pendiente:- descubrir en que consiste la libertad.
(pausa)
-Vaya! -dije- (algo que yo nunca me había cuestionado)
-Él agregó:- ese estado incondicional de la existencia “tú manera de ser”
-mi manera de ser! - exclamé-
-EPISODIO VII
SOÑAR DESDE EL SER INTERIOR
“Soñar desde el Ser Interior, significa concretar los sueños en la plenitud de la existencia"
Al examinar el diálogo, descubrí que Santos había encontrado la llave “maestra”
-Cualquiera que se atreva a preguntar, obtiene la respuesta-
El “secreto” original de cómo usar los sueños para crear la realidad, es un conocimiento que la humanidad posee...sin embargo, atrapado en el “ego” como el gusano en su capullo, solo aquél que logra romper la trama de la ilusión, podría acceder al vuelo de la mariposa.
Los códigos se liberan y cualquier cosa que necesitaras en todos los niveles de la existencia, la tienes a disposición.
Es una tarea indelegable…nadie puede recorrer el camino por nosotros; tampoco depende de la reserva acumulativa de posesiones materiales, por la cual se limita la realidad del mundo y de la vida, que redundan en dogmas y en cristalizaciones mentales.
-prosigue-
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